La neumonía es una infección común de las vías respiratorias que padecen millones cada año. Ocurre cuando se inflaman los sacos de aire (alveolos) en uno o ambos pulmones, y se llenan de fluidos o pus.
Pueden causarla bacterias, virus y hongos. En los adultos, las bacterias son la causa más común de neumonía.
La neumonía, una afección respiratoria muy frecuente
Puntos clave
Es muy frecuente y ocurre cuando se inflaman los sacos de aire de los pulmones.
En los adultos, las bacterias son la causa más común de neumonía.
Hay vacunas para prevenirla.
Los síntomas más comunes de la neumonía son:
Tos (con algunas formas de neumonía se puede expectorar una mucosidad amarillenta o verdosa, o incluso moco con sangre).
Fiebre que puede ser baja o alta.
Escalofríos con temblores.
Dificultad para respirar (puede únicamente ocurrir cuando subes escaleras o te esfuerzas).
Las formas como se puede contraer la neumonía incluyen:
Las bacterias y virus que viven en la nariz, los senos paranasales o la boca pueden propagarse a los pulmones.
Puedes inhalar algunos de estos microbios directamente hacia los pulmones.
Los factores de riesgo que aumentan las probabilidades de contraer neumonía incluyen:
Enfermedad pulmonar crónica (EPOC).
Fumar cigarrillos.
Demencia, accidente cerebrovascular, lesión cerebral, parálisis cerebral u otros trastornos cerebrales.
Problemas del sistema inmunitario (durante un tratamiento para el cáncer o debido a VIH/SIDA o trasplante de órganos).
Otras enfermedades graves, como cardiopatía, cirrosis hepática o diabetes mellitus.
Cirugía o traumatismo reciente.
Cirugía para tratar cáncer de la boca, la garganta o el cuello.
El tratamiento dependerá de que tipo de neumonía es.
Si se diagnostica una neumonía bacteriana, es muy importante que los antibióticos se tomen tal cual la indicación médica y no se detenga el tratamiento, aunque la persona se sienta mejor. Con tratamiento o cuidados, la mayoría de las personas mejora al cabo de dos semanas. Los pacientes de edad avanzada o muy enfermos pueden necesitar tratamiento por más tiempo.
Hay vacunas para prevenir la neumonía. Se trata de la primera línea de defensa contra esta afección, y son seguras y eficaces. (Hola Doctor).