En Valledupar, más de cien personas de familias campesinas, representantes de organizaciones de víctimas y de movimientos sociales, así como comunidades indígenas, hicieron parte de la Mesa Campesina de la Unidad de Restitución de Tierras, Cesar-La Guajira, estrategia que busca fortalecer la gestión integral de la entidad, mediante una ruta que promueve el enfoque de restitución colectiva con el campesinado y otros sujetos (colectivos), a quienes se les reconoce como de especial protección constitucional.
El evento encabezado por la directora de URT Cesar-La Guajira, Piedad Ramírez Ariza y el director social de la entidad, Jhon Jairo Rincón, forma parte de las apuestas institucionales de la URT en el marco del Enfoque Diferencial Campesino y de la Acción sin Daño, de participación social y del reconocimiento de las luchas del campesinado, de las comunidades y las organizaciones sociales.
«Hemos convocado a familias campesinas que solicitan restitución de las tierras que les fueron despojadas, líderes y lideresas de los diferentes municipios del Cesar, a quienes les damos claridad sobre la ruta de restitución, explicando los mecanismos para acceder y garantizar sus derechos sobre la tierra y el territorio. Nos complace la participación de las organizaciones de víctimas y de los movimientos que hacen parte de nuestra Mesa Campesina”, indicó Ramírez Ariza.
La directora de la URT Cesar-La Guajira agregó que la Mesa Campesina cumple el llamado a la permanente articulación de las instituciones con el pueblo, lo cual es parte de los propósitos del gobierno del presidente Gustavo Petro. “El cumplimiento de la Ley, así como de las orientaciones de las diferentes áreas de la URT, nos convocan a crear espacios para el desarrollo integral del proceso que gestionamos, en el que articulamos esfuerzos en beneficio de las víctimas, sobre todo para escucharlas, generando reflexiones y resultados” dijo la directora territorial.
A los participantes se les orientó con base a los lineamientos de la Circular 027 de 2022, emitida por la URT en ese mismo año, en la que se promueve una ruta de atención que reconoce al campesinado y los trabajadores rurales como sujetos de derechos y de especial protección constitucional, impulsando un enfoque colectivo en la restitución. Para esto, se tienen en cuenta entre otros aspectos que se trata de: hechos victimizantes comunes, trayectoria organizativa similar, elementos identitarios que los identifican, además de un victimario común, así como la temporalidad de los hechos victimizantes que causaron el despojo y abandono forzado.
Lo anterior se considera en la URT Cesar-La Guajira, territorial que gestiona dos procesos de restitución de tierras en el marco del sujeto colectivo, los cuales avanzan en etapa administrativa. Sus líderes fueron convocados al espacio en el que, se aclararon dudas sobre estos procesos en particular, permitiendo que los asistentes reconocieran las afectaciones, historia, memoria y la relación con el territorio, a partir una metodología que incluyó, reflexiones, socio dramas, mística, además de mesas de trabajo y plenarias.