El Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio expidió la Resolución 0194 de 2025, que define los parámetros y lineamientos de construcción sostenible y adopta la guía para el ahorro de agua y energía en edificaciones públicas o privadas. Esto permite reducir consumos, aliviar el gasto en servicios públicos y reducir la presión sobre la naturaleza.
La norma sustituye la Resolución 0549 de 2015, que marcó un hito al establecer por primera vez directrices para alcanzar ahorros mínimos en consumos de agua y energía diferenciales por clima en edificaciones residenciales, comerciales, oficinas, hoteles, centros educativos y hospitales.
“Esta actualización representa un avance significativo hacia un desarrollo territorial más justo, socialmente responsable y ambientalmente consciente, donde el bienestar de las personas y la integración con la biodiversidad local son el eje central», precisó el ministerio de Vivienda en un comunicado de prensa.
El alcance del marco normativo sobre construcción sostenible se enfoca en definir unos porcentajes de ahorro mínimos, entendidos como la proporción del consumo de agua y energía que se busca disminuir en las edificaciones, mediante la implementación de medidas activas y pasivas en las fases de diseño y construcción.