El más reciente boletín agroclimático de la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (Upra) indica que Colombia atraviesa una alta probabilidad (71%) de transición hacia el fenómeno de La Niña (posiblemente débil) entre los meses de octubre y diciembre de 2025. Este escenario pronostica un aumento de las lluvias en varias regiones del país, con posibles efectos en la agricultura, la infraestructura rural y la seguridad alimentaria.
Al respecto, Juan Pablo Sandoval, director general de la Upra, dijo que en el último trimestre del año se esperan las condiciones más críticas, debido a que se prevé un aumento de las lluvias en gran parte del país, especialmente en las regiones Andina y Caribe (entre un 20 % y un 30 % por encima de lo normal).
“Este comportamiento variable del clima exige una planificación territorial detallada y diferenciada”, dijo Sandoval, quien agregó que el boletín agroclimático está basado en predicciones climáticas del Ideam, un análisis de los centros internacionales y una evaluación del riesgo del Sistema de Información para la Gestión del Riesgo Agropecuario (Sigra).
Por su parte, Alfonso Triana, líder del Sigra, en la Upra, informó que el análisis permite prever que “más de 67.000 hectáreas dentro de la frontera agrícola nacional presentan riesgo por exceso de lluvias entre septiembre de 2025 y febrero de 2026”.
Asimismo, manifestó que las zonas con mayor riesgo se concentran en departamentos como Magdalena, Valle del Cauca, Antioquia, Caldas, Chocó y Huila.
En ese análisis se contempla una mayor vulnerabilidad sobre los cultivos de papa, cebolla, hortalizas de hoja, musáceas (plátano y banano), cacao, café, aguacate y frutales.
Triana también alertó sobre impactos diferenciados en territorios de agricultura campesina, familiar, étnica y comunitaria, donde los sistemas de pequeños productores presentan mayor vulnerabilidad ante suelos aluviales y drenaje limitado. Se prevé que más de 19.000 hectáreas en estas zonas estén bajo riesgo por exceso de lluvias.