La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos observa desde el año 2022 hasta la fecha un incremento de la violencia territorial en la región de la Sierra Nevada de Santa Marta, que comprende los departamentos de Magdalena, La Guajira y Cesar, lo que tiene a los cinco pueblos indígenas Kogui, Wiwa, Arhuako, Kankuamo y Ette Naka en riesgo de extinción física y cultural.
Así lo evidenció Scott Campbell en una visita de dos días que hizo a la Sierra Nevada de Santa Marta.
“Los Pueblos Indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta sufren ataques crueles y diversos por parte de los grupos armados no estatales, con consecuencias devastadoras en sus vidas, su tierra, su territorio, su gobierno propio, su autodeterminación, su cultura, su espiritualidad y su sistema de justicia propia”.
Esta situación de violencia según la ONU Derechos Humanos en Colombia se debe a la disputa del control territorial, rutas del narcotráfico y de diversas actividades ilícitas de los grupos armados ilegales, con graves afectaciones a los derechos de los Pueblos Indígenas y también de comunidades afrodescendientes y campesinas. Hasta hoy, la respuesta del Estado ha sido insuficiente.
Se ha verificado el control social de los grupos armados a través de: Restricciones a la movilidad con imposición de horarios, toques de queda, limitaciones a la reunión; interrupción y presencia de miembros de grupos armados en reuniones de pueblos indígenas; e imposición de conductas de convivencia.
“Las mujeres indígenas de los pueblos de la Sierra Nevada de Santa Marta nos dieron un testimonio valiente y angustioso desde sus experiencias de vida, nos urgieron pedir al Estado que garantice sus derechos colectivos, simplemente, para seguir existiendo como pueblos indígenas. Llamaron a que las niñas, los niños, los adolescentes y los jóvenes tengan acceso a educación, salud y trabajo en su territorio, así como por servicios de salud adecuados para las niñas, niños y adolescentes víctimas de violencia sexual; Algunas mujeres indígenas describieron su acceso a los derechos humanos como si se encontraran en el siglo X”. Aseguró Scott Campbell.
En lo que va de 2025, ONU Derechos Humanos ha recibido cinco alegaciones de homicidios de personas defensoras en los departamentos de la Sierra Nevada de Santa Marta: Magdalena, La Guajira y Cesar, y han documentado una masacre, con tres víctimas, en La Guajira.
La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos reitera la necesidad de que el Estado colombiano, a nivel nacional y local, adopte medidas conjuntas de prevención y protección para la población que habita la región de la Sierra Nevada de Santa Marta y en particular para los cinco pueblos indígenas.
También reitera su recomendación para que con prioridad en los diálogos y negociaciones con los diferentes actores armados incluyan el respeto a los derechos humanos y al Derecho Internacional Humanitario, incluida la prohibición del reclutamiento de menores. (vía caracolradio).