Unidades pertenecientes a la Sijín de la Policía Cesar, en diferentes hechos en Valledupar, capturaron a un hombre sindicado de homicidio y hurto calificado agravado, y a una mujer implicada en el delito de tráfico de estupefacientes. Los operativos contaron el apoyo del Ejército Nacional.

El primer operativo se adelantó en el barrio Nuevo Milenio de esta ciudad, donde fue capturado Luis Aníbal Barrera Silva, de 25 años de edad, quien es requerido mediante orden judicial emitida por el Juzgado 18 de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de Bogotá DC, por el delito de homicidio agravado en concurso heterogéneo con tentativa de homicidio agravado; igualmente es solicitado mediante orden del Juzgado 3 Penal Municipal con función de conocimiento de Bogotá, por el delito de hurto calificado y agravado.

De otro lado, en la carrera 26D del barrio El Oasis, fue detenida Yanina Lorena Jiménez Moreno, de 40 años de edad, por el delito de tráfico fabricación o porte de estupefacientes, a quien le hallaron en su residencia doce dosis de cocaína, seis de marihuana y veintinueve dosis de bazuco listas para su comercialización.

Dentro de las investigaciones adelantadas, Barrera Silva es un actor prolífico, reincidente y peligroso para la sociedad, debido al número de investigaciones que registra, donde es requerido por el delito de homicidio agravado, solicitado por el Juzgado 18 Ejecución Penas y Medidas de Bogotá, para cumplir una condena de 22 años, según hechos sucedidos el 02 de abril de 2018 en la calle 128 #93-27 de Bogotá, cuando en medio de una riña asesinó con arma blanca a Fabio Orlando Ardilla Delgado.

De acuerdo a las autoridades, se presume que esta persona, se encontraba escondida en esta ciudad utilizando el dialecto y acento de venezolano para evadir los controles de las autoridades. Asimismo, el Juzgado 11 de Ejecución Penas y Medidas de Bogotá, lo condenó a 18 meses de prisión, por el delito de hurto.

Con relación a la captura de Jiménez Moreno y la incautación de estupefacientes, se sacan de las calles del sur de la ciudad, más 50 dosis de alucinógenos, que venían afectando el entorno educativo del colegio Milciades Cantillo.